La hermandad de donantes de sangre que desarrolla su labor en Almendralejo ha conseguido recaudar un total de 2.688 bolsas de sangre en todo el periodo de 2016, tras la última campaña celebrada en diciembre. La cifra supera a la del año pasado y la valoración que se hace desde el colectivo vuelve a ser muy positiva.

En la última campaña de diciembre se ha logrado reunir 854 bolsas, un número ligeramente por debajo de lo esperado. De nuevo se ha resistido la barrera de las mil bolsas en una única campaña, aunque como suele decir Antonio Mulas, «la sangre es vida y, cuánta más, siempre mejor». En la primera campaña de abril se recogieron 892 bolsas, mientras que en la de agosto, la más numerosa, se alcanzaron las 942 bolsas. El virus del Nilo, que afectó a muchos donantes que habían viajado a la costa andaluza, privó durante el verano haber roto la barrera de las 1.000 bolsas.