La intersección entre la avenida de Goya, carretera de La Fuente, y las calles Jaraiz y Talayuela será regulada con una nueva rotonda, según ha aprobado la última Junta de Gobierno Local, al adjudicar dicha obra a la empresa almendralejense Hormicex.

La adjudicación de esta rotonda, por valor de 107.964 euros, se ha desarrollado por el procedimiento de negociado sin publicidad a la que invitaron a dieciséis empresas de la localidad, de las que once presentaron ofertas. Al final, y tras una baja importante, se ha adjudicado por 76.620 euros. Antes de su adjudicación definitiva, se pidió a la empresa un informe dada la bajada tan importante realizada, del 29,3%, mientras que el resto de aspirantes estaba en torno al 16% de descenso. Después de la presentación de este informe técnico positivo, se aprobó la adjudicación final.

En breve, y tras la firma del contrato, comenzarán las obras, que se estima duren aproximadamente dos meses desde la firma de replanteo. Para llevar a cabo esta importante obra de infraestructura viaria en la ciudad "ha habido que estudiar la mejor colocación, ya que hay calles que no confluyen con el ángulo deseado", aseguró el primer teniente de alcalde, Luis Alfonso Merino Cano, que explicó el objetivo de esta actuación. "Lo que se pretendía es dar solución a toda la intersección a sabiendas de que se debe renunciar a esa gran parte peatonal que está delante de la entrada del parque", añadió.

Gracias a esta rotonda, justificó Merino Cano, se acabará con esa "incertidumbre" que existía entre los conductores y usuarios de estas vías a la hora de ceder el paso, y que ha provocado en varias ocasiones accidentes de tráfico importantes.

Esta actuación permite adaptarse a todas las directivas europeas en materia de tráfico a la hora de solucionar problemas de este tipo, que en casi el cien por cien de los casos se arregla con la colocación de rotondas que agilicen y den claridad a la circulación.

Con la construcción de este nueva rotonda en la ciudad, se completa una acción importante en la regulación del tráfico que conllevaba la colocación de otras dos más ya finalizadas y en uso, concretamente las situadas en dos de las avenidas residenciales de Almendralejo, una en Rafael Alberti y la otra --una de las actuaciones más demandadas por los vecinos-- la que se encuentra en la avenida Miguel Hernández, en la que los vecinos tenían que hacer casi un kilómetro para ir en sentido contrario.