García Lobato anunció que esta corrección y actualización de la tarifa del servicio de aguas puede ser la llave que abra la posibilidad de elaborar unos presupuestos para el ejercicio 2017. El alcalde explica que, hasta la fecha, no pudo hacerse por la deuda de casi diez millones a la que hubo que hacer frente por unas expropiaciones y porque la deuda contraída con Socamex (2 millones de euros) debía aparecer en un presupuesto como gasto, lo que sumado a las expropiaciones sumaban más de 10 millones de una vez en esa partida, algo que el regidor considera como "inviable en un presupuesto". Ahora, pagada casi la totalidad de las expropiaciones y desbloqueado esta cuestión del agua, hay luz verde para hacer nuevos presupuestos. Recordar que los actuales están prorrogados desde 2010.