Romeros y vecinos de Almendralejo no quisieron perderse ayer su tradicional cita con San Marcos. El santo recibió de nuevo el calor de sus vecinos y fueron más de mil personas las que acompañaron a la imagen hasta su ermita durante la procesión. Pañuelos rojos, cánticos de la tierra y, sobre todo, un gran ambiente para vivir otro San Marcos en compañía. La fiesta no para, pues el fin de semana permite vivir hoy domingo otro día de campo con amigos y familiares.