Unas 120 personas, entre ancianos y niños, participaron ayer en la convivencia intergeneracional que organizó la Concejalía del Mayor para festejar el Día del Abuelo, y en el que los más pequeños aprendieron qué juegos a los que jugaban los mayores.
Durante la mañana en el paseo central del parque de la Piedad se desarrollando diferentes juegos con los que los ancianos pasaban sus ratos libres cuando eran pequeños. Desde tirar las latas, traspasar balones por un agujero, la oca, el parchís, coger peces con una caña o la tela.
APRENDIZAJE Estos juegos, reproducidos de nuevo, hicieron disfrutar tanto a mayores como a pequeños. "A unos porque recuerdan su infancia y a otros porque aprenden algo nuevo con lo que divertirse", señaló la delegada del Mayor, Esperanza Lozano, quien anunció que las próximas actividades para los mayores serán en las fiestas patronales.
Además, antes de comenzar la convivencia, uno de los niños, Pablo, leyó una carta a los ancianos, en la que destacó la labor que hacen con ellos al cuidarles. "Y aunque nos riñan muchos, como los padres, les queremos muchísimos". Durante el descanso se repartieron helados y al finalizar los pequeños recibieron algunos regalos de los mayores.
Los niños forman parte de diversos talleres talleres, que imparte la universidad popular durante el verano, mientras que los ancianos son usuarios de las residencias de Nuestra Señora de la Piedad y Las Mercedes y de los diferentes centros de día de la ciudad.
