El centro de educación especial Aprosuba de Almendralejo ya está utilizando el nuevo edificio que ha contruido la Junta de Extremadura. Las nuevas instalaciones se han creado en la finca que Aprosuba posee a 2 kilómetros de la localidad en la carretera de La Fuente del Maestre. Es un edificio de dos plantas y que ha supuesto un coste para el Gobierno regional de unos 360.000 euros, 60 millones de pesetas.

Las nuevas instalaciones, que aún no se han inaugurado oficialmente, albergan talleres que a su vez acogen a unos 90 discapacitados que trabajan en actividades de motricidad y logopedia, entre otras materias.

El director de Aprosuba, Leocadio Moya, indicó que el nuevo edificio era necesario para la comunidad educativa y reconoció que aún restan algunos detalles por hacer, como, unas rampas de acceso en la parte trasera o la instalación de un ascensor, al margen de la calefacción con la que ya se ha dotado al centro.

Por otro lado, cuarenta empresas e instituciones de la comarca han donado una furgoneta de nueve plazas al centro de educación especial. Cada una de las firmas que han apoyado la iniciativa han pagado una media de 1.500 euros. El nuevo vehículo se presentó públicamente ayer y servirá para transportar a los 160 alumnos con los que cuenta Aprosuba y que cada día, en dos turnos diferentes, son desplazados por personal del centro. Del total del alumnado de Aprosuba, 90 proceden de 26 poblaciones que se encuentran repartidas por toda la provincia.