El número de bañistas de la piscina municipal ha descendido este verano en 2.000 personas, según el concejal de Deportes, Francisco Hernández. De este modo, hubo 16.500 usuarios frente a los 18.500 del pasado año.

En días laborables, se bañaron 5.400 adultos y 7.100 niños. Por el contrario, en los días festivos la afluencia de bañistas adultos superó las 2.000 personas, mientras que el número de niños no llegó a los 1.900.

PERDIDA DE AGUA Los motivos del descenso de la asistencia han sido varios. Las suaves temperaturas de este verano y la creciente construcción de piscinas particulares han contribuido a ello. Pero sobre todo, el retraso en la apertura de la misma. Mientras que en 2007, los almendralejenses pudieron disfrutar de la piscina pública desde el 20 de junio, este verano no se abrieron sus puertas hasta el 5 de julio. La causa de dicho retraso fue la obra para arreglar las pérdidas de agua que sufría.

En cuanto al número de abonos, se han vendido 137: 19 para menores de ocho años, 37 para mayores de 9 años y menores de 16, 43 para adultos y 38 para pensionistas.