Un invierno lluvioso, un verano con excesivo calor y enormes cantidades de pasto que se secan con rapidez son aspectos determinantes para que estemos presenciando un verano con muchos incendios en el campo. "Hace mucho calor, el combustible vegetal se seca rápido y, evidentemente, el fuego se propaga con más velocidad", explica Domingo Durán, jefe del parque de bomberos de Almendralejo, que habla de un 2015 con bastantes complicaciones con el fuego. Especialmente por la quema de pastos y rastrojos, algo que supone casi el 70% de las intervenciones que el cuerpo ha hecho.

En el cómputo global, el parque local lleva contabilizadas 363 salidas (con fecha 22 de agosto), mientras que solo en todo 2014 se habían anotado 350. En menos de ocho meses, ha superado el número de salidas del pasado ejercicio y la cifra se encamina a situarse como una de las más altas de la última década cuando finalice diciembre. El registro más alto se sitúa en 2010, con 490 actuaciones.

EL DATO COMPARATIVO Las altas temperaturas están ocasionando muchos incendios, especialmente en verano. Desde la puesta en marcha del Plan Infoex el pasado 15 de mayo, las salidas triplican a las del año pasado. 29 este año por 12 del junio anterior; 90 por 30 en el mes de julio; y 44 por 14 en lo que llevamos de agosto. La mayoría de ellos son intencionados, informan desde Bomberos, ya que se suceden por las noches cuando no hay focos caloríficos. Este año, el originado en la zona de las Cavernosas, en Tiza, donde se quemaron 34 hectáreas de eucalipto y monte bajo el pasado 11 de junio, ha sido el más aparatoso.

Bomberos en Almendralejo cuenta con 22 miembros más el jefe de parque. Si lo precisan, cuentan con el apoyo del parque de Villafranca de los Barros. Domingo Durán no se olvida además de la crucial labor que desempeñan la policía local y la Nacional en todas las intervenciones: "nos lo hacen mucho más fácil". Todavía queda algo de verano y por eso, se insta a extremar las precauciones ante las altas temperaturas.