Caja Rural de Almendralejo ha comprado el edificio que alberga el hospital asilo del Pilar. El consejo rector de la entidad financiera dio el pasado 17 de diciembre el visto bueno a la operación de adquirir el centro sanitario. Por el momento, no se han facilitado cifras, aunque lo abonado supera los 3 millones de euros, cantidad a la que ascendía la deuda del Pilar.
El patronato del centro seguirá dirigiendo la actividad sanitaria y geriátrica del hospital asilo, ya que Caja Rural de Almendralejo sólo interviene para comprar el edificio. Así, desde ahora, el patronato pagará una cantidad módica en concepto del alquiler del inmueble.
En principio, la entidad financiera almendralejense pasa a ser la titular del edificio. El patronato tiene un contrato de alquiler de diez años. Si pasado ese plazo el Pilar obtiene beneficios suficientes, puede recomprar el inmueble; si no, se prorrogará el contrato de arrendamiento.
Con esta operación, el hospital asilo podrá hacer frente a la deuda de unos tres millones de euros que arrastraba desde el 2002. Además, sobre el patronato había ahora 15 embargos pendientes de ejecutarse. El pago a los proveedores se realizará de forma aplazada en los próximos tres años. Hoy se abonarán los atrasos contraídos con los trabajadores, y que son tres pagas extras y la nómina de diciembre.
VALORACIONES El director general de Caja Rural de Almendralejo, Fernando Palacios, explicó ayer que no se trata de una operación financiera, sino que que es de carácter social "para evitar que desaparezca un símbolo de Almendralejo y muchos puestos de trabajo". Sebastián Guerrero, presidente de la entidad, comentó sobre el acuerdo: "No podíamos permitir que una institución de nuestro pueblo desapareciese y, con todo esto, sólo intentamos salvarla".
Por su parte, el presidente del patronato del Pilar y alcalde de Almendralejo, José María Ramírez, reconoció que, tras dos años de negociaciones, el siguiente capítulo en la crisis del centro era su desaparición. Agradeció el comportamiento de los trabajadores durante estos meses, la paciencia de algunos proveedores y la ayuda del protectorado que dirige los patronatos de la región y que depende de la Consejería de Presidencia.
El alcalde agradeció la apuesta de Caja Rural de Almendralejo ya que "no había más salidas". "Habíamos negociado con otras entidades antes, pero algunas, como es el caso del BBVA, se han portado muy mal con el patronato". Ramírez se mostró muy optimista ante el futuro del hospital, aunque pidió más ayuda a la Consejería de Sanidad.
