El campamento de inmigrantes de Cruz Roja cumple su primer mes de funcionamiento en el parque de Santiago. El proyecto, financiado por la Junta y ejecutado por la ONG, ha cambiado sus reglas de funcionamiento. Así, ahora los temporeros ya no sólo pueden estar siete días, sino que los hay que llevan todo el mes en el centro.

En la actualidad, seis trabajadores de Cruz Roja atienden a 120 temporeros (la mayoría rumanos, menos un español y una venezolana), por lo que su ocupación es del 34% del total de 350 plazas. La mayoría de los usuarios del centro son jornaleros que trabajan durante las mañanas y vuelven al campamento a descansar.