El ayuntamiento paralizó ayer unas obras de derribo de parte del cerramiento de la ciudad deportiva del Extremadura por carecer de licencias municipales. Maquinaria enviada por la firma Proinex, empresa a nombre de la cual se han escriturado ya las instalaciones, comenzó a trabajar ayer por la mañana en la demolición de las planchas de hormigón que cierran el perímetro de la ciudad deportiva local.

Poco después de iniciarse los trabajos, los técnicos del ayuntamiento comunicaron a los operarios de la empresa que no podían seguir con su cometido ya que Proinex aún no puede ocupar los terrenos de la ciudad deportiva y la obra se clausuró.

En estos momentos, el suelo está en proceso de recalificación y la nueva catalogación de los terrenos debe pasar por la Comisión Regional de Urbanismo para ser suelo de tipo industrial.

Ayer, se reunieron el alcalde José María Ramírez, y el presidente del Extremadura, Pedro Nieto. Tras ello, éste explicó que "me ha sorprendido que hayan querido empezar los trabajos. Aún quedan flecos por cerrar, por ejemplo, cómo y cuándo se va a delimitar el terreno que no se ha vendido y que será de propiedad municipal".