Según los responsables de Vinibasa, el problema de los malos olores que se respiran en la localidad de Almendralejo puede estar en las montañas de orujo almacenado en las instalaciones. Hasta treinta millones de kilos de orujo se acumular en plena campaña para ser utilizado.

Un equipo de personas ha visitado la pasada semana la industria para intentar de manera inmediata reducir los olores. La intención es aplicar unos desodorantes que absorben estas emanaciones. "Vamos a probar y ver si se puede reducir el problema" apuntan fuentes de Vinibasa.