La Guardia Civil ha detenido a dos vecinos de Almendralejo y Villafranca de los Barros, ambos de 33 años, por usurpar identidades de otras personas para contratar líneas telefónicas y adquirir terminales de última generación, que después vendían en tiendas de telefonía móvil de segunda mano y a particulares. La investigación comenzó a mediados del pasado año cuando un vecino de Villafranca denunció el cargo que le habían realizado en su cuenta, por el importe de un contrato de varias líneas telefónicas y la adquisición de tres teléfonos que nunca realizó ni recibió. La Guardia Civil averiguó que los terminales se entregaron a través de paquetería y recogidas en mano y sospechó que pudieran haber usurpado la identidad del denunciante. Seis meses después, los agentes obtuvieron la identidad de la persona que usurpó la identidad de la víctima, un vecino de Almendralejo con antecedentes similares. Utilizaba direcciones domiciliarias ficticias y, para anticiparse a la entrega por paquetería, aludía la comodidad de recogerla en mano. Una vez que conseguía los terminales, los vendía a bajo precio a su cómplice. Esta persona era el encargado de venderlos en tiendas de segunda mano. Se calcula que fueron vendidos una treintena de móviles.