Un preso incendió uno de los calabozos de la comisaría del Cuerpo Nacional de Policía cuando prendió fuego a una de las mantas del habitáculo. No hubo que lamentar ningún daño personal, ya que los bomberos rescataron pronto al detenido del intenso humo que produjo la combustión. El hombre había sido apresado por robar un bolso en la calle y el fuego se produjo con unas cerillas que portaba en su abrigo y que no se detectaron en el cacheo.