TLtos Obispos extremeños emitían el 21 de octubre un comunicado en el que recuerdan a sus diocesanos derechos y obligaciones que competen a los padres acerca de la educación religiosa y moral de sus hijos. En resumen decían: "Compartimos con el Gobierno central y autonómico la necesidad de que, en la situación actual de la sociedad, haya en la escuela una verdadera y esmerada educación cívica que tenga como base las normas de convivencia, el ordenamiento constitucional y las declaraciones de los derechos humanos. La Iglesia en Extremadura se ofrece a colaborar en este empeño no sólo en la Escuela sino también en cualquier ámbito para ofrecer a niños y jóvenes una formación integral. Nos reafirmamos en la opinión de que la formación de la conciencia moral es competencia exclusiva de los padres y que el carácter obligatorio de EDUCACION PARA LA CIUDADANIA vulnera los derechos de éstos. Nos sentimos obligados a recordar a los padres católicos que tienen el deber de situarse responsablemente ante esta materia utilizando los medios legítimos a su alcance, entre ellos la objeción de conciencia. No está en nuestro ánimo alentar al incumplimiento de una ley, pero faltaríamos a nuestro deber si no dijéramos que esta asignatura es contraria a la Doctrina Social de la Iglesia y al derecho de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones morales. Por ello nos sumamos a todos los que consideran que esta asignatura debería ser de carácter opcional y no obligatoria como aparece en la Ley de Educación". Bueno sería recoger estas palabras y actuar en consecuencia.