Los propietarios de la empresa sevillana Galsur, Demetrio y Francisco Javier Gallego, llevan acampados desde el miércoles en la puerta del edificio de Konecta en señal de protesta porque la empresa que los subcontrató, Expolais, no les ha pagado los trabajos realizados, valorados en 22.000 euros, y que son necesarios para que puedan pagar a sus trabajadores y proveedores.