Una huelga de partidos celebrada durante el pasado fin de semana y el continuo descontento de participantes en la liga municipal de fútbol sala, evidenciado en redes sociales y grupos de whatsapp, han servido para que la Asociación Deportiva Local de Fúbol Sala, organizadora de la liga en el polideportivo, haya bajado el precio que los equipos han de pagar por encuentro, de 20 a 15 euros. La medida frenado el descontento y los representantes de los jugadores esperan que sea un antes y un después.
La liga local de fútbol sala congrega a casi 300 participantes repartidos en 22 equipos. Hasta la fecha, y desde hace ya más de cinco años, cada equipo tenía que soportar 20 euros de gasto por partido. De los 40 euros que generaba el encuentro, 10 se los quedaba el ayuntamiento en concepto de alquiler de pista, 14 euros iban para el árbitro principal, nueve para el árbitro de mesa y el resto (siete euros) para la asociación organizadora.
Los equipos han explotado. Años atrás, las empresas respiraban más aliviadas y los patrocinios soportaban los gastos de toda la liga. Ahora, son los propios jugadores los que tienen que financiar el coste de jugar. Y les parece elevado. Por eso, el pasado fin de semana protestaron con una huelga de partidos y no se jugó ni sábado ni domingo. Esto ha servido para una serie de reuniones y desatascar la situación.
CONCESIONES / La asociación local de fútbol sala asume el reajuste de costes. El ayuntamiento seguirá cobrando diez euros por el alquiler, aunque el concejal de Deportes, José María Cabañas, se ha comprometido ante representantes de los jugadores a darle una solución a los problemas de la pista, que en ocasiones patina en exceso y es peligrosa para su integridad física, así como dispondrán de un pequeño marcador de mesa, ya que el electrónico del pabellón Extremadura lleva meses fallando.
Las noticias han sido bien acogidas entre los equipos y ya se juegan partidos.
