Las procesiones de bajada y subida de la Virgen de la Piedad con motivo de las fiestas de la patrona cuentan todos los años con el mismo problema: la falta de costaleros para hacer una en condiciones. Por eso, Álvaro Ortiz, coordinador de estas procesiones desde hace más de 50 años, ha indicado que lo ideal es hacer una asociación de costaleros única y exclusivamente para estos dos desfiles de agosto. «Lo hemos intentado varios años, pero nunca ha salido. Pero es que ahora ya tenemos que hacerlo para normalizar la situación», asegura.

Cada grupo de costaleros se componen de 28 voluntarios. Ha habido años que llegaron a existir hasta cuatro grupos para estas procesiones, pero la falta de tiempo para ensayos y las vacaciones de verano han provocado muchas ausencias. Se demandan hombres, ya que Álvaro indica que las mujeres no fallan y hay suficientes.

De otro lado, la procesión de bajada de la patrona del santuario a la Purificación será el 5 de agosto, desde las nueve de la noche. El itinerario es el siguiente: Atrio de la Piedad, calle Monsalud, Vistahermosa, Pedro Navia, Cantones, Julián García Hernández, San Antonio, Miguel Antolín, Guadalupe, Ermita, plaza de Santiago, Zurbarán, plaza del Corazón de María, Judería, plaza de España y entrada en la parroquia de La Purificación. La patrona lucirá su manto blanco. La subida será el 14 de agosto.