La Concejalía de Medio Ambiente ha iniciado una nueva campaña de recogida de pilas usadas, para lo cual se han instalado cien puntos de recogida por diferentes edificios públicos y establecimientos comerciales de electrónica en los que los usuarios podrán depositar las pilas gastadas en los dos tipos de contenedores que habrá: uno para las de botón y otro para el resto.
Esta es una nueva campaña con la que se pretende concienciar sobre "el daño medioambiental que genera el abandono de las pilas y acumuladores usados y el uso de estos contenedores", señaló ayer la delegada de esta área, Isabel Murillo, quien explicó que la recogida se hará de forma periódica y que será la empresa Minusbarros la que se encargue de hacer esta tarea, para luego llevarlas a reciclar.
