El ayuntamiento ha comenzado a instalar los cinco puntos permanentes de control de vertidos de las empresas, de los que uno ya ha empezado a funcionar, según informó ayer el concejal de Aguas, Pedro García.
El punto que ya está en marcha se encuentra en la calle Badajoz y ayer comenzaron a instalar el segundo, en el parque de El Espolón. Otros dos se pondrá en el polígono industrial y el quinto en la carretera de Badajoz, antes de llegar a la rotonda.
El fin de esta actuación es el de prevenir que no se produzcan vertidos ilegales de determinadas empresas a los colectores de aguas residuales urbanas. La intención es hacer una mediación continúa para que cualquier vertido se detecte inmediatamente y así poder comprobar si se trata de un vertido "accidental o dolorosamente alguna empresa lo ha hecho", manifestó el concejal.
En definitiva, lo que el ayuntamiento persigue es prevenir y evitar que con la nueva depuradora pase "lo mismo que con las dos anteriores, que al producirse determinados vertidos no han funcionado bien", recordó el concejal, quien añadió: "Los fines son que no se hagan vertidos ilegales, que si se hacen se detecten a tiempo para averiguar la empresa responsable y que el agua que entra y sale de la depuradora permita criar determinados peces", apuntó García.
MENSAJE DE ALARMA El funcionamiento de los controladores consiste en la mediación continúa de varios parámetros característicos que indican la presencia o no de vertidos industriales. Cuando la medida sobrepasa los límites marcados, el sistema envía un mensaje a una persona determinada indicándole el valor del parámetro que ha sobrepasado al límite. El siguiente paso es averiguar la empresa que lo ha realizado y acudir a ella para realizar un muestreo "para después abrir un expediente", dijo García. Sobre esta cuestión, el concejal aclaró que la sanción dependerá de la forma en que se ha haga el vertido, ya que puede ser accidental por avería en la instalación o intencionado.
INICIATIVA LOCAL Según el edil, este sistema de control es pionero en la región. "Es la preocupación de Almendralejo y hemos dado un paso más porque tenemos a la vista la terminación de la depuradora que supondrá una fuerte inversión pública y no nos podemos permitir caer en el mismo error de arrojar una serie de materias que afectan al funcionamiento de la depuradora", reiteró García, quien reconoció que esta localidad arrastra este problemas de vertidos desde hace tiempo y prueba de ello "es la reciente sanción al ayuntamiento porque hace años salieron de la depuradora una serie de aguas con una composición química que dañaba el medioambiente".
