THtace unos meses era inverosímil. Patxi López merecía ser lendakari por múltiples razones.Con enorme valentía y no menos dignidad ha aguantado la presión y el embate nacionalista. Suena hasta bien: lendakari López Alvarez. Que un personaje rancio y peligrosamente antidemocrático como Xavier Arzallus incite a la rebelión social por el acuerdo responsable entre nacionalistas y populares, cuando él públicamente y cuando le interesó, piropeó a Aznar en la propia sede popular de Génova 13 , es lo menos que se podía esperar del personaje. Sabino Arana, "padre" del nacionalismo vasco, que curiosamente aprendió esa lengua después de su Primera Comunión, se inventó la supremacía de la raza vasca a costa de llamar despectiva e insultantemente a los españoles maquetos , inmorales, corruptos y degenerados. López, bizarro, de un metafórico hostiazo nos acaba de liberar de otro reprimido aranista como Ibarretxe, ya triste historia, y si además el árbol de Guernica aparece pintado con los colores de la bandera española, tampoco afea. Todo sea por homenajear, aunque tardíamente, a las víctimas del terrorismo y porque pueda regresar a su tierra ese 10% de empresarios vascos que por no pagar el impuesto revolucionario, para defender sus vidas, tuvieron que autoexiliarse. Que hoy Patxi López no utilice en su toma de posesión la fórmula tradicional nacionalista: Juro humillado ante Dios.... es una decisión personal respetable. Sabino Arana, autor de Dios y leyes viejas , nos menospreciaba a los españoles por no ser católicos puros. Por eso ETA se engendró entre sotanas en un seminario.