Parece que el bloqueo político de las altas esferas en el Gobierno central no va a demorar más tiempo la instalación de una de las infraestructuras más esperadas por los ciudadanos de Almendralejo y que servirá para resolver muchos de los problemas medioambientales que se han sucedido en los últimos años. El nuevo colector de aguas residuales que fue aprobado hace ya algún tiempo y que tiene que sustituir al actual, que tiene más de 40 años, será una realidad en 2018. El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) ha anunciado, a través del Boletín Oficial del Estado (BOE), la licitación del contrato para ejecutar la obra para la construcción del nuevo emisario de Almendralejo. La dirección general del Agua, vinculada a este ministerio, es la encargada de tramitar este expediente cuyo presupuesto base de licitación es de 3.517.426 euros. Todas las empresas que aspiren a realizar esta obra tienen de plazo para entregar la documentación e información pertinente hasta el próximo 11 de noviembre en Madrid. La apertura de los sobres con las ofertas se producirá el 26 de enero del próximo año. No hay fechas concretas, pero desde el equipo de gobierno aseguran que la actuación comenzará a lo largo del 2017 y tiene un plazo máximo de ejecución de un año. Son conscientes de que habrá ofertas ventajosas e incluso bajas temerarias, algo que podría dilatar algunos meses más la puesta en marcha del proyecto, pero todo apunta que en 2018 ya estaría funcionando.

El nuevo colector estaba dentro del Plan de Medidas para el Crecimiento, al Competitividad y la Eficiencia del Gobierno central, cuyo importe era de 118 millones de euros. Ya fue publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea y la publicación en el BOE confirma la obra. La actuación plantea la instalación del nuevo emisario desde el punto de vertido actual de aguas residuales hasta su conexión con el punto de reunión de entrada a la nueva depuradora. Con anterioridad ya fue licitado el pliego de bases técnicas para el contrato de servicios de asistencia a la dirección de obras, con importe de 300.000 euros. La obra sustituirá los actuales emisarios de aguas residuales urbanas que, como ya informó en su día la Confederación Hidrográfica del Guadiana, se encuentran en un mal estado de conservación.

Las obras recogidas en el proyecto contemplan la construcción de un colector de 6.186 metros de longitud a base de una tubería de propileno de 1.200 milímetros de diámetro; pozos de registro a base de fábrica de ladrillo macizo y de un metro de diámetro interior; y el conexionado de los emisarios y colectores ya existentes. Desde el equipo de gobierno indican que es una «muy buena noticia» y que servirá para que la actual depuradora de aguas funcione con un rendimiento óptimo y no como ahora, que se encuentra infrautilizada al asimilar tres veces menos cantidad de agua diaria de la que podrá con este nuevo emisario. Según ha podido saber este diario, actualmenten llega a la estación central de depuradora unos seis mil litros de agua, cuando la instalación, de última generación, permitiría llegar a los 18 mil. No obstante, la obsolescencia del colector impide este máximo rendimiento. H