En torno a 600 personas retrocedieron el pasado fin de semana en el tiempo para disfrutar de una de las actividades más tradicionales: la matanza. La caseta municipal fue el escenario de la matanza didáctica que organizó la Peña Amigos del Caballo, en colaboración con el ayuntamiento, y que sirvió para recaudar fondos para las familias del economato social. A falta de liquidar costes, unos 2.000 euros podrían ser donados.
Fue una jornada intensa en la que los más jóvenes pudieron conocer las explicaciones sobre cómo llevar a cabo la tradición. Café con migas, caballos y las clásicas pruebas para degustar. Todo amenizado con los versos recitados por Ventana Literaria y los bailes y acordes de la asociación Tierra de Barros y el grupo flamenco de Santiago.
