José Julio Mateos sabe perfectamente cómo es y qué dimensión tiene el infierno de las drogas. Lo ha vivido y experimentado en primera persona durante 25 años, pero ha sabido salir. Lo ha hecho con la ayuda de su entorno y su familia, y ahora tiene claro que su misión es ayudar a salir de ese mismo infierno a otras personas. Por ello, este almendralejense ha creado Asodalc, una asociación para drogodependientes de Almendralejo y comarca. Es el primer colectivo sin ánimo de lucro que trabaja con los enfermos adictos a las drogas, aunque lo hará desde un punto de vista cognitivo. Asegura que trabajará en la modificación de las conductas de sus usuarios «para así modificar sus hábitos de vida».

Para lograrlo, se ha preparado a conciencia y ha obtenido el título de terapeuta en drogodependencia y adicciones, y cursará un máster en psicología social.

La nueva asociación tiene su sede en el número 28 de la avenida de la Paz. Los martes y los jueves se atenderá a los usuarios que necesitan terapia, mientras que los viernes se reservará para los familiares. Aunque la asociación ya está tratando a un usuario, abre oficialmente sus puertas el próximo 5 de diciembre.

José Julio Mateos asegura que tiene conciencia de que «hay población que necesita este tipo de asociaciones en la comarca. Hay mucha gente que necesita ayuda, especialmente cada vez más los jóvenes», pues indica que la drogodependencia aparece cada vez más en edades tempranas.

El que lo desee puede ser socio por 25 euros al año. El dinero se empleará en los gastos corrientes del colectivo y en la celebración de actividades de terapia con familiares, como excursiones. El local lo cede su padre. Eso sí, Mateos aclaró que los que no puedan hacer frente al pago de la cuota no lo harán, ya que recuerda que no hay ánimo de lucro.

Además ya se han puesto en contacto con los técnicos de Servicios Sociales del ayuntamiento y los de los centros de salud para ponerse a disposición de los mismos por si consideran preciso derivar usuarios a la asociación. Su manera de trabajar será haciendo un seguimiento continuo a cada paciente y estableciendo un protocolo de normas y pautas a seguir tales como terapias, seminarios informativos y otras cuestiones. Trabajarán tanto desde el enfoque de la rehabilitación como el de la prevención.