Según los plazos marcados por el propio ayuntamiento de Almendralejo, a lo largo del próximo mes de noviembre comenzará la reforma de la carretera de Santa Ana. La obra abarca desde el inicio de esta vía, en la travesía de la Nacional 630, a la altura del cruce con la calle Labrador. En este caso, se trata de la principal arteria de comunicación entre la misma N-630 y la carretera de Badajoz.

Por el momento, en esta semana, la comisión de Obras del gobierno municipal tiene previsto reunirse para estudiar la propuesta que los vecinos realizaron al ayuntamiento este verano. En su petición, el colectivo vecinal solicitó que se modificase el proyecto inicial de la obra que incluye calzadas de adoquines. Según los residentes en la zona, este tipo de material, que es el que actualmente tiene la vía, genera mucho más ruido que el asfalto.

El alcalde de la localidad, José María Ramírez, aseguró a este diario que "entre todos los grupos políticos se estudiará una solución, ya que aunque el adoquín genera ruido, está claro que el asfalto produce mayor inseguridad, puesto que los vehículos adquieren más velocidad".

AMPLIACION DEL PRESUPUESTO

Por otro lado, la obra se licitará en octubre, tras la aprobación de una ampliación en el presupuesto. Y es que una serie de mejoras han incrementado el gasto previsto hasta los 400.000 euros.

En este sentido, esa modificación se incluirá como un punto más en el orden del día de la sesión plenaria ordinaria del mes de septiembre que se celebrará el próximo lunes en el salón noble del ayuntamiento de la localidad.

Por último, la obra de rehabilitación consiste en la creación de nuevas zonas de aparcamiento en los laterales de la calzada, pero también está previsto dar prioridad al peatón. Así, se van a construir mejores acerados que los que existen actualmente, se van a sembrar árboles y se van a instalar una serie de bancos para hacer la carretera más habitable y transitable para los ciudadanos y para los propios conductores.