Las obras de remodelación y ampliación de la depuradora de aguas residuales de Almendralejo ya se han iniciado con vistas a finalizar dentro de 36 meses, según anunció el viernes Eduardo Alvarado, presidente de Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), que se encarga de su financiación

En los últimos 20 años, Almendralejo ha experimentado un "notable incremento de población y de la actividad económica", por lo que las instalaciones de tratamiento de agua que hay en la ciudad se han quedado obsoletas. Ello provoca "que un porcentaje muy importante de las aguas residuales brutas se incorpore al dominio público hidráulico sin someterse al tratamiento de depuración".

Con la reforma de la depuradora su capacidad pasará de 7.100 metros cúbicos a 18.000 y la capacidad de tratamiento será equivalente a la de una ciudad de 210.000 habitantes. Alvarado aseguró que estas obras, al ejecutarse por fases, no provocarán suspensiones en la actividad de la depuradora.

Por su parte, el alcalde de Almendralejo, José María Ramírez, anunció que el ayuntamiento actuará contra las industrias que no depuren correctamente, aunque se sintió satisfecho con la depuración de las empresas de aderezo de aceituna de la ciudad.

REUNION DEL VIERNES Ramírez y Alvarado mantuvieron el viernes una reunión en la capital de Tierra de Barros para repasar las inversiones que realiza la Confederación Hidrográfica del Guadiana en Almendralejo y que superan los tres millones de euros. Una de ellas es la reforma de la depuradora, en la que se invertirán más de catorce millones de euros.

Actualmente se construyen cinco nuevos depósitos de aguas, dos en la Etap (Estación de Tratamiento de Agua Potable) y otros tres en la zona de El Escobar. Está previsto que las obras concluyan en marzo del año que viene y su presupuesto es de cinco millones de euros. Además, ahora el abastecimiento de agua a Almendralejo se efectúa por bombeo desde el río Matachel. Este agua almacenada se guarda en un depósito ubicado en la Etap que está muy deteriorado y es insuficiente. Este será derribado y sustituido por otros dos. Cuando la presa de Villalba de los Barros esté concluida, Almendralejo se abastecerá de ella.

La otra actuación es la reforestación del arroyo de Las Picadas, cuyas obras ya han finalizado. La inversión ha sido de casi un millón de euros, lo que ha permitido cambiar la fisionomía de cinco kilómetros por donde transcurre el arroyo, desde la N-630 hasta su desembocadura en el arroyo Harnina. Además, de conseguir que el agua que transcurre por él sea limpia.