Mozart nunca acabó de escribir está obra. Murió antes. Pero es considerada como una obra maestra de la música clásica y uno de los temas más importantes de su carrera. el Réquiem fue un encargo para un funeral. Dicen algunos historiadores que también para el suyo; que el misterio, el dolor, el drama y la belleza están presentes en él.

No es fácil ver a una orquesta sinfónica interpretar este Réquiem . Los que la han escuchado en directo hablan encantados y los que la han tocado con algún instrumento dicen que para ellos ha sido un reto por su complejidad. En Almendralejo, el Requiem sonó hace dos años y el domingo volverá a sonar. Este vez en un escenario y formato diferentes.

La primera vez se interpretó en la parroquia de la Purificación, el escenario perfecto . Fue la orquesta del conservatorio oficial de música quien se encargó bajo la dirección del profesor Angel Jiménez, quien repetirá el domingo a las ocho, pero en esta ocasión dirigirá a ochenta músicos pertenecientes a la orquesta y al coro de la Escuela de Badajoz. Será "más profesional y más didáctico". También estarán la soprano almendralejense Eva Alén, la mezzosoprano Marta Infante, el tenor Víctor Sordo y el bajo Manuel Torrado. La puesta en escena será diferente. Se "contextualizará" el teatro Carolina jugando con la colocación de la orquesta y el coro y con las luces para "crear el ambiente propicio de la obra".

Las entradas están aún a la venta. Cuestan 14 euros anticipadas y 18 euros en taquilla. Se pueden comprar en la taquilla del teatro y en la oficina de turismo en su horario habitual.

Angel Jiménez es un profesor del conservatorio a quien le encargaron este trabajo en otra ciudad española. Pensó que podría también llevarse a cabo en Almendralejo y se puso a trabajar en ello junto al conservatorio. El Requiem solo se interpretó una vez ese año, pero el trabajo para organizarlo fue mucho mayor. Fruto de ello fue el éxito que tuvo. Se recuerda como el concierto de música clásica más multitudinario vivido en la localidad. En total asistieron más de seiscientas personas y hubo otros cientos que no pudieron acceder a la parroquia al encontrarse el aforo lleno. Estas personas ahora tienen ahora una segunda oportunidad. Será el domingo, y esta vez con un formato muy distinto.