Bomberos, policía local y Nacional asistieron ayer a una mujer de unos 80 años que se había caído en su casa cuando estaba sola. El suceso ocurrió en la calle Carolina Coronado. La anciana comenzó a gritar cuando tras la caída vio que no podía moverse. Los vecinos, alertados, llamaron a la policía. Los bomberos tuvieron que derribar la puerta para entrar, siendo la mujer trasladada al centro de salud con fuertes dolores de cadera hacia abajo.