Trabajadores del servicio de agua, sindicatos y representantes del ayuntamiento firmaron ayer el convenio para este servicio antes de proceder a su privatización.

Este era uno de los requisitos necesarios para llevar a cabo el proceso de traspaso de los trabajadores del sector público al sector privado.

En el convenio se recoge una cláusula que establece que si en el plazo de un año algún trabajador quiere reincorporarse al ayuntamiento, este se compromete a readmitirlo. Además, desarrollaría su trabajo en una de las plazas libres que hubiera en ese momento.

SATISFACTORIO El portavoz del equipo de gobierno, Fernando Bote, destacó que se ha realizado un trabajo importante para poder firmar el acuerdo.

"El resultado es bastante satisfactorio para que los trabajadores del servicio pasen con todas las garantías a manos de la dirección de esta empresa, aunque seguirán siendo siempre trabajadores municipales". Cuando esta concesión concluya, los operarios volverán al ayuntamiento.

REUNIONES CON LA OPOSICION En el pleno de este mes se debatirá el pliego de condiciones, señaló Fernando Bote, que espera que sea aprobado, tras las reuniones que se han mantenido con los miembros de la oposición.

"Consideramos que está lo suficientemente estudiado para debatirlo en pleno", añadió.

Si el pliego es aprobado se abrirá un plazo de 30 días para la presentación de ofertas por parte de las empresas interesadas y otros 30 días para estudiar las mismas y decidir.