La ruta nacional anual que el Vespa Club Tierra de Barros (VCTB) realiza cada verano llegó este año a su cuarta edición y lo hizo con destino Cantabria, con parada en su capital, Santander. Anteriormente han hecho el Camino de Santiago, lagos de Covadonga y Lisboa. El viaje ha sido del jueves 28 al domingo, 1 de julio, con 23 participantes, 19 vespas y dos coches de apoyo.

Este año, como novedad, destaca que pararon dos días en el lugar de destino, aumentando así las jornadas de convivencia entre los vesperos participantes.

Han sido cinco días en los que se han recorrido 1.700 kilómetros distribuidos en cinco etapas. Salieron de Almendralejo con destino Valladolid, donde hicieron la primera parada. La segunda fue en Santander, haciendo en tan solo dos días casi la mitad de los kilómetros. El tercer día visitaron San Vicente de la Barquera, el cuarto Segovia y regreso a Almendralejo, donde cumplieron con el rito de agradecer a la Virgen de la Piedad que el viaje saliese bien, además de realizar la ofrenda floral.

Han cruzado las provincias de Badajoz, Cáceres, Salamanca, Zamora, Valladolid, Palencia, Santander, Burgos, Segovia, Ávila y Toledo y han estado acompañado por clubes de la zona, que han respirado el ambiente en torno al mundo de la Vespa que ha repartido el VCTB.

En estas paradas, el Vespa Club se ha convertido en el mejor embajador del cava de Almendralejo, con reparto de botellas y organizando catas en restaurantes de las zonas. De esta forma se cumple otro de los objetivos que se plantean como prioritario, vender la marca Almendralejo, Tierra de Barros y Extremadura.