La familia del Centro Universitario Santa Ana vive, posiblemente, una de las semanas más felices de su historia. La reciente concesión de la Medalla de Extremadura se ha celebrado por todo lo alto y cuentan los días para recibirla en el mes de septiembre. A su directora, Carmen Fernández-Daza, la noticia le ha cogido de vacaciones en el extranjero, pero ya ha comentado a Francisco Zarandieta que responda en su nombre a todos los agradecimientos. "Está más que feliz. Deseando volver a la ciudad para agradecer a tanta gente el masivo apoyo en tan poco tiempo", afirma. Zarandieta, presidente de la Federación Extremadura Histórica que ha encabezado la propuesta, no se olvida del trabajo que inició hace medio siglo Mariano Fernández-Daza, fundador del centro y padre de Carmen. "Su valor, coraje e involucración por este proyecto fue determinante", incide.

Para Francisco Zarandieta, "esta medalla honra a muchos años continuados de trabajo por la cultura, no solo de Almendralejo y comarca, sino de toda la región". Santa Ana atesora cuatro grados universitarios oficiales, varios másteres y algunos seminarios consolidados como las Jornadas de Viticultura y Enología que ya acumulan 38 años.

De entre todos los aspectos que la Junta ha podido ver determinantes, hay dos que destacan. Uno es la Biblioteca IX Marqués de la Encomienda, cuyo fondo documental es consultado por investigadores y estudiosos de todos los puntos del planeta. Otro, la creación en 1969 de la Escuela Hogar Santa Ana, que tomó especial relevancia en tiempos difíciles. "Posibilitó la escolarización de niños y personas que estaban en lugares diseminados y de difícil acceso, ofreciendo la formación que muchos de hoy tienen", indica Zarandieta.

En apenas mes y medio, la propuesta recibió casi 500 adhesiones procedentes de ayuntamientos, instituciones y particulares. Zarandieta dice que "no fue clave la cantidad, sino la calidad", argumentando que los escritos dejaban grabada la importancia que el centro ha tenido para la sociedad y cultura de esta comunidad.