Trayectorias enfrentadas las de los dos equipos extremeños que comenzaron el año en la división de plata del fútbol nacional. El Badajoz, a pesar de sus titubeantes inicios que dieron lugar a una crisis de identidad y al cese de Juanjo Díaz, el entrenador que comenzó la campaña, vivió el efecto Alhinho y sorprendió a propios y extraños con una impresionante racha de victorias consecutivas. Desde que Carlos Alhinho ocupó el banquillo albinegro el cuadro albinegro comenzó una remontada impresionante que le llevó a consolidarse en posiciones desahogadas de la tabla de clasificación. Sin embargo, el hombre del milagro no pudo afianzarse en el banquillo del Nuevo Vivero y sus enfrentamientos con el presidente, Antonio Barradas, le hicieron tener que abandonar el barco y dejar su puesto a un hombre de la casa, Juan Antonio Rodríguez Rodri .

Precisamente, el exjugador fue quien comenzó la presente campaña al frente de los destino del Badajoz tras salvar sin apuros el objetivo de la permanencia. Conhé le sustituyó cuando se decidió su cese y es el responsable de la plantilla. De momento la situación en la tabla es de relativa tranquilidad. Muchos jugadores clave se fueron en verano.

Por su parte, el Extremadura, que comenzó la temporada instalado en la zona de la clasificación que no implica agobios, entró en una dinámica de malos resultados que le hizo tocar la zona complicada. Cesado Ortuondo, con el equipo al borde del abismo, se dio la responsabilidad a Gori, que tampoco fue capaz de salvar la categoría. La llegada en el mercado invernal de hombres como Kiko Narváez o Pier sólo sirvió para dar cierto exotismo a la plantilla almendralejense.

El club azulgrana vivió también un cambio en su consejo, que derivó en la sustitución de Pedro Nieto y su equipo. El exfutbolista azulgrana Juan Francisco Rodríguez Juanito se hizo con el mando y con Francisco en el banquillo se pelea ahora por volver a Segunda.