Un 40% de extremeños sigue a la cola tecnológica de España, marginados por los operadores que no garantizan que puedan disponer en sus hogares de un servicio de banda ancha, ni por cable ni por ADSL. Un problema que ha llevado a varias comarcas del norte extremeño a hacer un frente común para exigir un servicio que ninguna de las empresas en el mercado les oferta.

En Extremadura hay instaladas en la actualidad más de 6.000 líneas ADSL, concentradas en las principales ciudades de la región. Las fuertes inversiones que son necesarias para ofertar este tipo de prestación ha llevado a las operadoras a abandonar comercialmente las zonas periféricas y las zonas rurales. La Asociación de Internautas ya advirtió el Gobierno que es necesario suplir estas carencias.