El escenario de las protestas contra la guerra de Irak se trasladó ayer a las bases militares que Estados Unidos tiene en España. Miles de personas se manifestaron frente a esas instalaciones de forma pacífica, a pesar de la lluvia en algunos casos. La más multitudinaria fue la de Rota, adonde acudieron 25.000 personas, según la Policía Nacional, y 70.000, según los convocantes.

TRADICIONAL MANIFESTACION

La marcha de Rota ya tiene tradición. Cada año comienza en la localidad gaditana de El Puerto de Santa María en protesta por la presencia de las bases militares en territorio andaluz. En esta 18 edición, ha sido más numerosa. Al habitual eslogan de la manifestación OTAN no, bases fuera se unió el No a la guerra .

La escritora Almudena Grandes, que denunció la existencia de armas de destrucción masiva en el recinto militar, y su marido, el poeta Luis García Montero, dieron lectura al manifiesto final. Las medidas policiales fueron extremas.

Una veintena de furgones de antidisturbios custodiaba el recinto, y otras decenas estaban a lo largo de los seis kilómetros de recorrido, sobre todo en un establecimiento de comida rápida de una cadena americana. En la cabecera de la marcha iba el líder de IU, Gaspar Llamazares, quien acusó al Gobierno de intentar confundir a la opinión pública al argumentar el envío de tropas al conflicto en misión humanitaria. "No han ido a poner tiritas, los barcos van cargados con misiles", aseguró.

A la protestas acudieron también grupos de manifestantes de Marruecos y Portugal. De este último país se fletaron tres autobuses desde Lisboa, Beja y Almada. El acto concluyó con la canción Imagine , de John Lennon, interpretada en inglés y en árabe.

LLUVIA

En Madrid, más de un millar de personas recorrieron, bajo una intensa lluvia, los 12 kilómetros que separan el barrio de Canillejas de la base aérea de Torrejón de Ardoz bajo el lema Muévete por la paz . La marcha la encabezaron dirigentes de IU. Sin embargo, el macro-concierto previsto para después, en el que iban a participar Amaral, Sober, Dover y Sexie Sadie y el cantante Antonio Orozco, tuvo que ser suspendido por la lluvia. La protesta se cerró con la lectura de un manifiesto por la escritora Lucía Echevarría y el actor Luis Tósar.

Los aragoneses también se movilizaron. Unos 8.000, asimismo bajo la lluvia, desfilaron desde Zaragoza hasta la base aérea. Los convocantes entregaron un escrito exigiendo "el cierre" de la base, colocaron globos blancos en las verjas de seguridad y plantaron un limonero "como símbolo de paz" en la entrada.

Unas 1.500 personas acudieron a la base de San Javier, en Murcia. En Los Llanos (Albacete) y en Bétera (Valencia), la participación fue menor.