«La calle parecía un río», declaraba ayer una de las vecinas afectadas por una avería de agua en Aldea Moret. La rotura de una tubería dejó a esta y otros tantos residentes de la barriada sin suministro durante casi doce horas. La incidencia afectó a cinco calles de la zona: Danubio, Volga, Rhin, Vístula y Hoyos.

La avería se produjo a las 20.00 horas del miércoles en uno de los conductos que conecta el paso del agua en la intersección de Vístula y Rhin. La fuga de la acometida provocó que el agua se desbordara hacia el exterior y se desplazara con intensidad por la pendiente que une las vías afectadas durante toda la noche.

Vecinos de la barriada lamentaron ayer la pasividad para solventar la incidencia que les dejó sin agua del miércoles al jueves. Por su parte, Canal de Isabel II, empresa encargada de gestionar el servicio en Cáceres, argumenta que la tardanza en devolver el suministro a la normalidad se debe a la «dificultad» para localizar la avería que se localizaba unos cien metros más allá de donde se desbordaba el agua.

Una vez localizada, la concesionaria procedió a aislar el tramo afectado, excavó el terreno y procedió a sustituir el tubo afectado por otro de un material más resistente -de fundición dúctil en lugar de fibrocemento- y del mismo diámetro que el que había resultado dañado.

Los operarios comenzaron a reparar la avería a las 10.30 horas y a alrededor de las 14.00 horas el servicio ya estaba restablecido en los hogares afectados por la incidencia, según añade Canal de Isabel II en un comunicado. La concesionaria esgrime que la rotura estuvo provocada por la antigüedad de la acometida y por el cambio de presión que se produce cuando cambia la temperatura o desciende el consumo.

No es la primera avería que ocurre en la ciudad por el mismo motivo en las últimas semanas. Las bajas temperaturas que registra la ciudad en las últimas semanas, la longevidad de la red y el estado de conservación del suministro también ha provocado varios percances de similares características en el centro.