La producción, unas 1.500 embarcaciones al año, se hará por pedido. La previsión es de 1.200 kayacs --piraguas cerradas-- y canadienses --abiertas--, y 350 hidropedales, con destino a la península Ibérica y Latinoamérica, donde mantienen contactos en Cuba, México, el Caribe y Brasil.

En Latinoamérica el destino es mandar hidropedales a zonas hoteleras. De los kayacs y las canoas, un 40% son autovaciables, para el mar; y el 60% para ríos y pantanos, sobre todo para Portugal y España. La inversión es de 900.000 euros para la construcción y la maquinaria, con 8 empleados.