Unas piedras de bruñir son las piezas del mes en el museo de la alfarería de Salvatierra de los Barros. El bruñido es una de las formas más antiguas de acabado de la cerámica. Su origen se remonta al neolítico y consiste en pulimentar la superficie exterior de la pieza. En Salvatierra era una actividad femenina y se hacía con un canto de río.