La Policía Local de Badajoz desalojó la tarde de ayer con la colaboración de la Guardia Civil y la Policía Nacional a un grupo de personas, miembros de una docena de «familias jóvenes del barrio, con hijos y sin casa», de varios pisos del número 4 de uno de los bloques de viviendas de la Guardia Civil, en Suerte de Saavedra. La alarma saltó a primera hora de la tarde, si bien el día anterior al menos cinco familias lograron entrar en otras tantas viviendas del mismo bloque, éstas con acceso por la calle Eduardo Naranjo, que permanecen en ellas después de habérseles tomado los DNI.

Tras la ocupación del pasado domingo, ayer, en torno a un centenar de vecinos de esa barriada permanecían en las inmediaciones del portal 4 del mismo bloque, por la calle Ventura Reyes Prosper, tras desalojar la policía local con ayuda de miembros de la nacional y Guardia Civil a los vecinos que intentaron ocupar otra decena de pisos vacíos en el mismo bloque.

El intento de ocupación fue en el portal 4. Varias jóvenes con bebés a cuestas señalaban que «esas casas llevan años vacías y nosotros tenemos hijos y estamos en la calle», afirmaban --preferían no dar su identidad--.

Varias mujeres mayores destacaban el intento de ocupación: «Son parejas jóvenes, preñadas, con hijos y sin una casa donde vivir; los echan pero ellos no quieren salir, es lógico». Una de ellas contaba que «tengo un hijo de 54 años, tiene retraso mental y cada vez comemos o dormimos en casa de otros hijos o donde nos dejan, porque no tenemos casa».

Otras justificaban la ocupación «porque no tienen donde meterse y aquí hay muchas casas vacías»; «además a algunos les han sacado la pistola», indicaba otra. Tras el desalojo, en el que no hubo daños personales ni detenciones, se reagrupaban hombres, mujeres, ancianas y niños a la espera de ver qué ocurría. Algunos mantenían el ánimo de volver a intentarlo cuando fuera posible.

Finalmente, la Guardia Civil decidió llamar a un herrero para soldar y sellar las puertas y se hizo cargo de la vigilancia del bloque, «hasta que se decida la resolución del expediente en marcha y qué hacer», según fuentes de la comandancia.

En Suerte de Saavedra hay otros dos bloques habitados por miembros de la Guardia Civil que no se ven afectados por esta reclamación vecinal, solo el que permanece vacío, reclamación que ya ha tenido, según fuentes de los propios vecinos, «un efecto llamada», dentro del barrio pero temen que llegue a los Colorines, señalaron fuentes vecinales.

Fueron guardias civiles de la zona quienes dieron la voz de alarma, por lo que acudieron miembros de la policía local y la nacional, que evitaron la segunda ocupación, tras culminarse la del día anterior.

El presidente de la Asociación de Vecinos de Suerte de Saavedra, Fernando Gonzálvez, abogó por que «la Junta o el ayuntamiento hablen con Interior e incorporen el bloque al parque de vivienda pública para uso social, porque hay muchas familias que lo necesitan; nosotros solo en la asociación, tenemos constancia de 20 o 30», dijo.

Varios colectivos han pedido en varias ocasiones, incluso en conversaciones con la comandancia, que se agilice la cesión de los pisos vacíos para que se puedan entregar a los vecinos que lo necesitan, «dando prioridad a los que residen en la barriada».