El Servicio Municipal de Servicios Sociales (IMSS) dejará de prestar el servicio de ayuda a domicilio a 502 de los 966 usuarios que tiene el mismo en en la ciudad, entre el 1 y el 23 de agosto próximo. Asi lo denunció Juan José Sierra, del grupo regionalista y socialistas del Ayuntamiento de Badajoz, haciéndose eco de las quejas de numerosos usarios por haber recibido cartas indicándoles la suspensión. Y así lo confirmó la propia concejala de Servicios Sociales, Rosario Gómez de la Peña, a este diario.

La responsable del IMSS explicó que de los 966 usuarios de ayuda a domicilio, 354 la reciben de una empresa contratada por el ayuntamiento y estos no verán interrumpida la ayuda, "porque tiene sus propios trabajadores y los sustituye en vacaciones de verano". Pero al resto de personas se les presta mediante una subvención de la Junta de Extremadura para contratos del Programa Extraordinario Fomento del Empleo, en colaboración con las corporaciones locales, que para obtenerla deben solicitarla cada año.

Ese dinero se puede destinar a contratos de otro tipo, pero el ayuntamiento, según De la Peña, destina los 143 contratos concedidos "a la ayuda a domicilio, consciente de la importancia que tiene este servicio". Pero estos trabajadores tienen "vacaciones y no se les puede sustituir por ese tiempo, que son 15 días, del 3 al 18 de agosto".

Lo que sí ha hecho el IMSS, dijo la concejala, es "que la empresa encargada del primer servicio tiene que prestar la asistencia de ayuda personal a 110 personas que la necesitan y que creemos que no pueden dejar de ternerla". Y pidió que si algún usuario de esta ayuda se ha quedado fuera, que se ponga en contacto con el IMSS para resolverlo.

Juan José Sierra, por su parte, reclamó que "este servicio no puede dejar de prestarse en verano, ni un solo día", y calificó la suspensión de "imprevisión flagrante que perjudica a los beneficiarios de esta atención social". El edil planteó que tiene que haber " turnos entre los trabajadores, o personal para cubrir esas ausencias puntuales, y presupuesto para que no se resienta esta prestación".

De "falta de gestión total" calificó esta situación Sierra, pues "¿qué pueden hacer con sus vidas estas personas durante esos días? ¿Podrán servirse de sí mismos, u organizarse hasta que lleguen nuevos auxiliares?", preguntó el concejal.

Para este grupo, "la política social compete al ayuntamiento y éste debe gestionarla para alcanzar la máxima optimización de recursos y dar cobertura en el tiempo al servicio de ayuda a domicilio".