Los cursos de prestación de servicios a personas con especiales necesidades que ha desarrollado el Instituto Municipal de Servicios Sociales a través del programa Proempleo, con financiación del Fondo Social Europeo, han permitido formar a 80 mujeres de la ciudad, que tras recibir formación teórica y práctica desde el pasado mes de abril, ahora son auxiliares de ayuda a domicilio, especializadas en atención a la infancia, cuidadoras de enfermos crónicos y de personas con discapacidad.

Las participantes en estos cursos recibieron ayer el título acreditativo en el ayuntamiento, de manos del alcalde, Miguel Celdrán, quien animó a estas mujeres diciéndoles que se han iniciado en una nueva profesión con una demanda creciente, sobre todo tras la aprobación de la Ley de Dependencia. Además, les comentó que si consiguen trabajo, no sólo tendrán la satisfacción de haber conseguido un empleo sino que realizarán una labor con la que además están ayudando a otras personas. La directora del IMSS, Pilar Morales, explicó que estas mujeres han realizado prácticas durante mes y medio, en algunos asociaciones de discapacitados, residencias de mayores y comedores.