Las previsiones sobre las reservas de agua para abastecer a la población de Badajoz son menos preocupantes en esta zona que en otros puntos de la región respecto a la sequía. Las últimas precipitaciones recogidas el sábado pasado en forma de tormenta en el embalse de Peña del Aguila, que surte a la capital junto a otras localidades, han incrementado notablemente la cantidad de agua embalsada, que ha aumentado casi un 5%.

En la última lectura realizada por la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) el 6 de marzo, el embalse se encuentra al 75,4% de su capacidad total, cuando la semana anterior estaba en el 70,8%. Estas cifras también son mejores que las captadas el año pasado en la misma fecha, cuando el embalse de Villar del Rey estaba al 70,7% (en la lectura del 7 de marzo del 2005).

El director de la CHG, José Martínez, explica que el pantano de Villar del Rey se ha beneficiado de dos tormentas importantes y por las especiales características de la cuenca que abastece a esta presa, hace que prácticamente todas las precipitaciones que caen en esta cuenca acaben en el embalse.

NO BENEFICIA A TODOS No ocurre así en otros embalses, en los que una gran parte de la lluvia se infiltra, no corre y no llega a la presa, por las características geológicas de la cuenca receptora del embalse. "Pero aquí Peña del Aguila prácticamente corre todo y las lluvias que han caído en las dos tormentas han dado lugar a que hayamos pasado al volumen que tenemos almacenado ahora", señala. Las dos tormentas a la que se refiere son una ocurrida en noviembre del 2005 y la del sábado 4 de marzo.

La población que se surte del embalse de Peña del Aguila, entre la de Badajoz y los pueblos que se han incorporado al anillo hídrico, consume 20 hectómetros cúbicos anuales. La cantidad de agua embalsada en estos momentos es de 98 hectómetros cúbicos. Restando la posible evaporación que haya y otros gastos de pequeñas zonas regables aguas abajo "podríamos decir que tenemos garantizado que en tres años teóricamente no deberíamos tener problemas", asegura José Martínez.

El embalse de Peña del Aguila tiene una capacidad para almacenar 130 metros cúbicos y ahora tiene 98, la mayor cantidad en lo que va de año hidráulico, que comenzó el octubre con 67,96 hectómetros cúbicos.

SEQUIA RELATIVA El director de la confederación argumenta que la situación de sequía es "relativa" en algunas zonas. Desde el punto de vista agrícola o ganadero "está lloviendo muy bien este año" pero en cuanto a las aportaciones a los embalses "está siendo relativamente malo, porque llueve pero no de forma continua, con lo cual hay embalses que han recogido agua pero otros apenas nada y no han sufrido prácticamente variación". De ahí que las reservas sigan siendo igual o algo inferiores que años anteriores en estas presas, con lo cual la situación de sequía no ha desaparecido.

Además, en determinadas zonas, cuando los embalses son de carácter anual si durante este año no ha llovido "están peor que el año pasado". No es el caso del de Villar del Rey, "porque no nos podemos quejar de cómo lo tenemos", recalca el director de la confederación.