Un hombre de 32 años resultó ayer herido de gravedad tras ser acuchillado y golpeado por dos individuos que se personaron a las cinco de la madrugada en su domicilio, en el número 22 de la calle Golondrina, en la parte vieja de la barriada Cerro de Reyes. Los agresores llamaron a la puerta de la vivienda y la víctima abrió, momento que aprovecharon los dos hombres para asestarle varias puñaladas con un arma blanca y golpes con un martillo, según datos procedentes de la Jefatura Superior de Policía; con un cuchillo jamonero y un bate de béisbol, según dijo un familiar en la calle.

El herido, según fuentes consultadas, resultó ser R. J. S., de 32 años, que vive en el citado domicilio y que fue uno de los dos detenidos por el Cuerpo Nacional de Policía por el tiroteo ocurrido el 26 de marzo pasado en la calle La Cigüeña, paralela y a las traseras de donde han ocurrido estos hechos, acusados entonces de un presunto delito de homicidio en grado de tentativa. La policía investiga para establecer posibles conexiones con ése u otros hechos relacionados con la droga.

La policía acudió al lugar del suceso avisada por la familia del herido, cuya madre, que no quiso dar su nombre, manifestó que salió a socorrer al herido que se encontraba "ahí tirado en el suelo", señalando un reguero de sangre, unos metros más abajo de su casa que se encuentra en la parte alta de la misma calle.

Preguntada sobre si sabía quiénes son los agresores, la mujer afirmó que "yo no tengo nada que decir, lo que sea que lo averigüe la policía". Ningún otro vecino escuchó ni vio nada porque, dijeron, "era de madrugada y estábamos dormidos".

El herido intentó escapar a la carrera, según la policía, para refugiarse en otro domicilio de la misma calle, que en realidad es el de su madre. Horas después del suceso se mantenía el rastro de un reguero de sangre que dejó la víctima desde el portal de su casa hasta que cayó antes de llegar al otro domicilio familiar. Incluso se podían apreciar huellas de pie descalzo en sangre.

Una vez trasladado al Servicio de Urgencias del Hospital Infanta Cristina, la víctima quedó ingresada para su atención y observación. Fuentes del SES manifestaron que el estado del herido era de gravedad y que permanecía en la UCI con heridas de arma blanca y golpes, sin que aportasen más información "porque el juzgado ha decretado el secreto sumarial".