"Más vale tarde que nunca, aunque no sé quién va a pagar ahora los desperfectos, pues antes estaba arreglado y ahora tienen que volver a arreglar lo que se ha desarreglado". Así valoraba ayer el portavoz de los colectivos sociales de la margen derecha, Ricardo Cabezas, la situación del tramo desdoblado de la carretera de Cáceres. "Me parece bien que hayan llegado a un acuerdo, lo que no entiendo es que no lo hicieran desde el principio, cuando se terminó la obra", señalaba el presidente de la Asociación de Vecinos de Las Vaguadas, Guillermo Villasán, refiriéndose a la carretera de Valverde. "Ya era hora", manifestaba José Luis Iniesta, consejero delegado del Grupo Río, sobre la decisión de arreglar la avenida Adolfo Díaz Ambrona.

Estas eran tres de las opiniones vertidas ayer sobre el acuerdo adoptado el día anterior por el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, por el cual ambas administraciones consiguen entenderse por fin, tras nueve meses de desencuentros, para poder arreglar, traspasar y mantener dos de las entradas más transitadas de la ciudad: las de las carreteras de Cáceres con su prolongación por la avenida Adolfo Díaz Ambrona y la de la carretera de Valverde. Tres opiniones que representan las de muchos usuarios, vecinos y empresarios de las vías afectadas.

Las obras las acometió la Junta y las inauguró pero como las dos administraciones no se pusieron de acuerdo sobre su mantenimiento, han estado abandonadas hasta que han intervenido directamente Vara y Celdrán para llegar a un acuerdo en el que cada parte asume sus responsabilidades. Desde fuera, la opinión dominante es que el pacto es bienvenido si supone solucionar los problemas pero no se entiende que haya tardado tanto y que ahora haya que duplicar una inversión que ya se hizo y se ha perdido.

Iniesta se ha quejado en muchas ocasiones del mal estado de Díaz Ambrona, una vía que une dos puentes muy importantes de la ciudad y tres hoteles, entre ellos el de mayor categoría de la ciudad, en el que se alojaron los Reyes en su reciente visita. Iniesta no entró a valorar quién es el responsable de que se haya tardado tanto en alcanzar un acuerdo, pero recalcó que el adecentamiento de esta vía "es una necesidad, solo pido que la obra se haga bien para que las entradas y salidas a negocios y hoteles no presenten dificultades".

Para Ricardo Cabezas "es vergonzoso" que la Junta y el ayuntamiento no firmasen el acuerdo alcanzado ahora cuando terminó la obra de desdoblamiento de la carretera de Cáceres, pues se han dejado secar las plantas que habrá que reponer. "¿Porqué no se ha hecho un año antes? ¿Qué problema ha habido? ¿De quién es la culpa?", se preguntaba Cabezas.

Guillermo Villasán no quería entrar en culpar a ninguna parte, pero tampoco comprende que las dos administraciones no se entendiesen desde el principio para mantener la carretera de Valverde "y no llegar a esta situación, que nos va a costar dinero a los ciudadanos".