El juicio que comenzó ayer en la Sección Primera de la Audiencia de Badajoz --tras dos suspensiones anteriores-- y que continuará hasta mañana, en el que J. M. B. E. está acusado de un delito de abuso sexual de un menor con un grado de discapacidad del 44%, se celebra a puerta cerrada para preservar la privacidad de la víctima.

En la primera jornada de la vista oral prestó declaración el acusado, que negó tener relación alguna con los hechos, y consideró que «la denuncia de los padres del menor se debe a una motivación económica», según manifestó después su abogado defensor, Luis Carretero,

También se pasó una grabación de la declaración del menor, «que no se entendía», y declararon los padres de éste, quienes señalaron al acusado como autor de los supuestos abusos.

Tras ellos fue llamado a testificar un amigo del inculpado, quien manifestó que el mismo estuvo con él todo el día en la fecha y horario en que se supone que ocurrieron los hechos y que por tanto no pudo ser él.

El juicio continúa hoy a puerta cerrada con la declaración de más testigos y peritos.

Cabe recordar que el fiscal solicita para el acusado 8 años de prisión por los hechos ocurridos el 14 de junio de 2014 en el domicilio del acusado, según el informe provisional de Fiscalía, mientras que el letrado de la acusación declinó pronunciarse y el de la defensa solicita la absolución.