El juzgado de instrucción número 4 de Badajoz ha admitido a trámite una querella por estafa contra los empresarios de Golf Guadiana Angel Medrano y Rafael Alvarez Buiza, presentada por José Luis García, uno de los propietarios de las viviendas que finalmente se vendieron individualmente pero que tendrían que haber sido un apartahotel y sus dueños se encuentran ahora con que son ilegales.

Esta querella es anterior a la presentada en el juzgado número 2 de Badajoz por La Fiscalía Anticorrupción, a la que ésta última es ajena, pero en la que estarían imputados los mismos empresarios por este mismo asunto --entre otros--. El abogado de José Luis García , Manuel Borrego, ha pedido la acumulación para que se lleve en un solo juzgado.

La querella se presentó en abril, antes de que pudiera prescribir y, de momento, solo lo ha hecho este propietario a título personal, aunque otros están a la expectativa de los resultados para poder adherirse. Se trata de determinar si existen hechos delictivos y si avanzase en favor del querellante, se pediría una responsabilidad civil que no está ni prevista ni valorada.

El querellante se siente estafado porque él compró una vivienda "de buena fe" y "le han engañado porque ahora tiene una vivienda que no es legal", lo que le acarrea problemas de todo tipo, a la hora de pedir una hipoteca el banco no la concede y si quiere venderla tiene más dificultades porque esta situación ya es ampliamente conocida en la ciudad.

El complejo del Golf Guadiana se puso en marcha en base a la Ley de Oferta Turística Complementaria, que permitió desarrollar edificaciones residenciales y turísticas según un plan especial que incluía la creación de un apartahotel, que se construyó pero no llegó a funcionar como tal sino que cada vivienda que lo formaba se vendió por separado, actuación que sancionó la Junta de Extremadura, que confirmó la situación ilegal y clandestina de estas casas. Además, una sentencia de lo contencioso administrativo declaró ajustada a derecho esta resolución, aunque está recurrida.