A pesar de la tendencia de los últimos meses en el incremento del número de pernoctaciones, los datos no son halagüeños y el Ayuntamiento de Badajoz ya tenía decidido que las tarifas del albergue juvenil El Revellín, inaugurado a mediados del pasado mes de octubre, bajasen para hacerlo más competitivo respecto a otro tipo de alojamientos y otros albergues del entorno. El pleno de la corporación municipal aprobó el lunes los nuevos precios, que suponen una rebaja de hasta el 50% respecto a los actuales. Cuando entren en vigor, las personas con menos de 30 años pagarán 12 euros al día y los que superen esa edad, 15 euros, sin diferenciar si es temporada alta o baja. En principio y según la propuesta que fue al pleno, los niños hasta 13 años no pagarán cuando viajen en familia.
Estos precios no tienen nada que ver con los que abrió el establecimiento y aún están en vigor: para alojarse en el albergue de Badajoz, los niños de 3 a 14 años pagan 19 euros en temporada alta y 15, el resto del año, mientras que los que superan esa edad, deben abonar 25 euros en temporada alta y 21, en otras épocas. Se consideran periodos de temporada alta los Carnavales, la Semana Santa, la Feria de San Juan y Al-Mossassa. Además, con el cambio ya se contemplan precios más bajos para grupos, en función del número de miembros. Hasta ahora el 80% de los interesados en reservar habitación en este establecimiento lo hacen de forma colectiva. El Revellín dispone de 62 plazas, repartidas entre 11 dormitorios, con 4, 6 y 8 camas. La explotación se realiza a través de una concesión, que se adjudicó a la UTE formada por Geoactiva y Naturacción. Desde que se inició la actividad, los responsables de que funcione el albergue vienen demandando precios más atractivos.
El gerente, Carlos Mangas, muestra su satisfacción por la aprobación de las nuevas tarifas pues serán más competitivos y confía que con los nuevos precios se pueda llenar todos los fines de semana. Según el gerente, no hay otro albergue en Extremadura que pueda competir con el de Badajoz en cuanto a instalacciones y estructura. En los primeros meses del año, aunque los alojamientos han sido puntuales, se han ido incrementando y se llegó al nivel máximo de ocupación en Carnaval, con un 80% de las plazas reservadas. Para los días de Semana Santa tienen reservas, pero ayer aún no estaban confirmadas.
Entre otros cambios previstos, la concesionaria prevé ofrecer un servicio de cátering. Además, han presentado a la Policía Local y al ayuntamiento una solicitud para desviar el tráfico y poder utilizar la parte posterior del Revellín para aparcar. Junto al albergue está el centro de asociaciones, que funciona "bastante bien", según Mangas, aunque tampoco "al cien por cien".
