Hoy es el día. El alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, comparece esta mañana, por primera vez, ante los medios de comunicación para pronunciarse sobre el llamado caso Astorga. Fue él mismo quien ayer emplazó a la prensa a la convocatoria tras ser preguntado por el incidente del concejal de la Policía Local, Alberto Astorga, con un agente de la Policía Nacional por aparcar su moto en una plaza reservada para personas con discapacidad en la plaza de San José el pasado 13 de junio.

Los hechos se conocieron a principios del mes de agosto. El concejal primero lo negó, pasados unos días rectificó y pidió perdón a los ciudadanos por su comportamiento, aunque aseguró que no iba a dimitir como reclamaba la oposición porque los hechos no tenían "trascendencia".

El alcalde aún no se ha manifestado públicamente sobre este asunto. Fuentes consultadas por este diario apuntaron ayer la posibilidad de que Fragoso aparte a Astorga de la Concejalía de Policía Local y lo mantenga en Hacienda, aunque oficialmente no se confirmó este extremo.

Cuando el incidente salió a la luz Fragoso se encontraba de vacaciones, que prolongó por la enfermedad de su padre, quien falleció hace dos semanas. Ayer acudió a su primer acto público en la ciudad tras la vuelta al trabajo. Fue al minuto de silencio convocado por el ayuntamiento para condenar la muerte de las dos últimas víctimas mortales de la violencia de género, donde -tras ser preguntado por la prensa-- dijo que era un acto de "duelo", en el que no procedía hablar del caso Astorga. "Mañana (por hoy), tendremos todo el tiempo del mundo para que me hagan todas las preguntas que quieran", dijo.

Por su parte, el grupo municipal socialista acusó ayer, a través de un comunicado, al alcalde de "no haber estado a la altura" en el caso Astorga y mostró su rechazo a que el todavía concejal de Policía Local presida la junta de seguridad en la que se diseñará el dispositivo para la Noche en Blanco. Para el PSOE sería "incomprensible" que Astorga siga con esta competencia después de haber "infringido las normas aplicables a todos los ciudadanos y demostrar un claro abuso de poder".

Los socialistas añadieron que desde que se conoció el incidente muchos ciudadanos "cuestionan" el proceder del alcalde en este caso que, a su juicio, debería ser quien asuma las competencias en seguridad ciudadana "hasta que los hechos sean aclarados y depuradas las responsabilidades políticas".