Las baldosas de la recién remodelada plaza de España se están levantando y el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, reconoció ayer que puede deberse a que quizá la obra se terminó con demasiadas prisas y que además el pavimento se resiente por el paso de vehículos pesados, como son las máquinas de limpieza, que ya han sido retiradas.
Celdrán dijo que la obra pudo terminarse de forma apresurada por consideración con los comerciantes. Pero además apuntó "un problema de tratamiento", porque la base sobre la que van las baldosas tienen una parte hueca y el peso excesivo hace palanca y las parte. Las máquinas limpiadoras pesan más de mil kilos y se han sustituidos por la limpieza con mangueras, una solución que Celdrán espera que sea suficiente. Las baldosas están siendo repuestas por la empresa constructora, Ferrovial.
El alcalde hizo estas declaraciones tras la inauguración de las obras de remodelación de la calle Dos de Mayo, en la barriada de San Roque. La obra ha costado 480.000 euros y consta de 4.600 metros cuadrados de superficie, de los cuales más de 1.600 son de jardinería y el resto, solería. Asimismo se han instalado 60 puntos de luz nuevo y mobiliario urbano. Celdrán mostró su confianza en que la zona se revalorice y recordó que hoy se adjudicarán las obras de la calle y la calle Teresa Istúriz. La obra de la calle Dos de Mayo fue inaugurada, aunque faltaban 30 metros por terminar al final del paseo.
