Cuando parecía que nadie quiere a los gansos del parque del Guadiana en Badajoz, les ha salido un anfitrión. El alcalde de Don Benito, el socialista José Luis Quintana, está dispuesto a recibir en su localidad a «quince o veinte» de estos ejemplares, para repoblar la Lagunilla, donde siempre ha habido patos pero su presencia se ha reducido. Si el Ayuntamiento de Badajoz se encargase del traslado, «no nos importa traernos a unos pocos», ofreció ayer.

Según aseguró a este diario, Quintana ha intentado ponerse en contacto con el concejal de Medio Ambiente en Badajoz, Antonio Ávila, pero ayer no lo había conseguido. Sí había transmitido su ofrecimiento al portavoz municipal del PSOE, Ricardo Cabezas, y también al director general de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura. El alcalde señaló que en Don Benito existen tres espacios con patos y otras aves. Está la Lagunilla, que es una laguna que se encuentra en «una zona de expansión», en las proximidades de un centro geriátrico, donde ya hubo patos pero la población se ha reducido. También los hay en el parque de las Albercas, que precisamente se conoce como el parque de los patos, y en Doña Blanca.

Ayer, la portavoz del gobierno municipal de Badajoz, María José Solana, señaló que la Junta de Extremadura está realizando «un nuevo estudio» para intentar buscar una ubicación a los gansos del parque del río, donde ya hay más de 400 ejemplares «y se están extendiendo». La primera opción que el ayuntamiento recibió fue llevarlos al Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre que tiene la Junta en Sierra de Fuentes, en Cáceres, por eso Ávila realizó a principios de semana una prueba para comprobar que era posible capturarlos y trasladarlos en una gran jaula, convencido de que podrían reubicarse en Sierra de Fuentes. Pero en estas instalaciones se extrañaron dado que este lugar está dedicado a la recuperación de especies protegidas. Solana defendió que los gansos no sólo son responsabilidad del ayuntamiento, que carece de un lugar donde llevarlos, sino que también están implicados el colegio de veterinarios, la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) y la Junta.