El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, restó ayer importancia al hecho de que el Ministerio de Fomento haya tenido que rectificar una obra que en parte ya estaba terminada, correspondiente al proyecto de desdoblamiento de la avenida de Elvas, según adelantó EL PERIODICO. Celdrán comentó que "rectificar es de sabios" y añadió que modificar una obra ya realizada "no tiene nada de particular, aunque tampoco es tan frecuente", reconoció.

El alcalde se refería a que el ministerio ha procedido a levantar el acerado de todas las medias rotondas que ya había construido en el tramo entre Ifeba y el ferial. EL PERIODICO comprobó el miércoles que se habían equivocado en tres de las cinco rotondas, pero ayer ya estaban demolidos los acerados de las cinco glorietas, incluida la que da acceso al parque acuático.

Según el alcalde, esta equivocación puede ser consecuencia de que "cuando trabajas sobre planos, muchas veces te obsesionas en las medidas y no reparas en conjunto, vas a lo tuyo, planificas, diseñas, mides, tomas centros de referencia y al final trazas y cada uno va a lo suyo". La explicación que da Celdrán es que una vez realizada la calzada y las aceras, se ha observado que el ancho de la calzada en las rotondas debería ser mayor y que "sería aconsejable hacerlo más grande, por la inercia de los vehículos, que van un poco deprisa".

Celdrán considera que Fomento todavía estaba a tiempo de rectificar las rotondas, y hacer la calzada un poco mayor, tal vez medio metro, porque "ahora es el momento".

Respecto al gasto extra que estas modificaciones puedan suponer al ministerio, Celdrán comentó que estos cambios "siempre van metidos en los presupuestos, no es que sean normales, pero lo mismo se equivoca uno en el dibujo en una rotonda, como que al hacerla te encuentras una roca" y, según el alcalde, "estas incidencias pueden surgir a lo largo y ancho de una obra".

Celdrán no cree que este imprevisto tarde mucho en resolverse, "según mi criterio, habrán querido hacer algo ya definitivo y que revista mayor seguridad".

De momento, el ministerio sigue sin dar explicaciones sobre lo ocurrido en esta obra, que debe concluir a finales de año.